Todos tenemos malos días, eso es perfectamente lógico y normal y hace parte de la vida personal, del trato con los compañeros o porque tuvo un desacuerdo con un familiar. Eso le pone como ‘picantico’ a nuestra rutina. Pero no se puede convertir en un viejo y mal hábito, en primer lugar porque eso alejará a las personas que están a su alrededor.
No puede ser como aquellos amargados que viven peleando por todo. De hecho, un reciente estudio publicado por la revista indexada Cognitive Science reveló que hay gente que ama tanto las discusiones y peleas que descalifican hasta sus propios argumentos cuando les dicen que pertenecen a alguien más.
Un experimento tomó un grupo de 237 voluntarios, entre hombres y mujeres, y después de presentarles una serie de acertijos donde había, no una sino varias respuestas correctas, les pedían escoger una de ellas. Luego, a los mismos participantes les presentaban sus propias respuestas para pedirles que analizaran si eran correctas o incorrectas, pero con un truco: les decían que eran respuestas de alguien más.Aunque el 58% de los voluntarios reconocieron el truco, el resto no se dio cuenta: creyeron como ajenos sus propios argumentos y los descalificaron, es decir, pelearon hasta con sus propias respuestas.
Esa actitud conflictiva nos lleva a tener muchos más malos días que el resto. Y eso no puede ocurrir, usted tiene que lidiar con esa mala vibra. Debe aprender a transformar el mal día que tuvo para convertirlo en uno muy bueno, dice la especialista Gwen Moran, en un artículo publicado por el portal de la revista FastCompany.com. “Todos sabemos el sentimiento de sentirnos abrumados, molestos y sentir que las cosas van mal en el trabajo”, señala Moran.
Y cuando pasa, lo mejor es tomarse unos minutos para utilizar algunas estrategias probadas científicamente para cambiar el ánimo que produce un mal día. Estas son las principales:
#1. Cambie su enfoque
“Cuando el bus está demorado o el tráfico es terrible, es fácil empezar a sentir que el día empeorará, aún sin que haya empezado. Eso es un problema porque nuestras neuronas tienen la capacidad suficiente para darse cuenta de qué ocurre alrededor, en un fenómeno que se conoce como ‘Atención selectiva’”, indica Caroline Webb, CEO de Sevenshift, una firma de consultoría de Nueva York que enseña a las personas el uso de la ciencia conductual para mejorar en su vida laboral. Además escribió el libro ¿Cómo tener un buen día? Aproveche el poder de la ciencia conductual para tener un buen día”.
Cuando el mal día llega el remedio de Webb es este: suspenda lo que esté haciendo y simplemente enfóquese en lo positivo. “Decida notar tres cosas buenas. Ellas no tienen que ser particularmente grandes o significativas, quizá un afiche gracioso, una persona caritativa, un sombrero lindo. Eso restablecerá el ánimo, lo cual significa que usted tendrá más atención hacia las cosas positivas durante el resto del día.
#2. Escuche una canción triste
Parece contrario a la sabiduría popular que nos señala escuchar melodías alegres cuando nos sentimos mal. Pero dejarse llevar por una canción triste puede ser una mejor decisión, de acuerdo con Jane Scuder, coach de carrera profesional. En junio de 2016, un estudio publicado por el diario PLOS One encontró que para algunas personas es mejor cuando escuchan música de letras tristes.
Las canciones nostálgicas pueden validar los sentimientos de tristeza y permiten a la persona sentirse mejor con ellas mismas y lidiar mejor con sus emociones, explica Scudder. “Tu no quieres ignorarlos. No quieres decir solo decir “No, no me siento deprimido y mejor voy a escuchar una canción alegre. Me encuentro completamente bien”, dice la experta. Eso simplemente embotellará esas emociones. Si se siente triste o frustrado, permítase un momento para usted mismo y asimilar ese sentimiento de tristeza o frustración. Eso le permitirá continuar.
#3. Aspire esencia de vainilla
Las esencias tienen poderosas propiedades y algunas en especial le ayudan a sentirse mejor. Una investigación de 2005 publicada por Chemical Senses concluyó que esencias como la de vainilla y la clementina pueden ayudar a la gente a sentirse más felices. Una inhalación de su esencia favorita podría ayudarle a sentirse mejor durante un mal día.
#4. Cambie de entorno
Según Scudder, un cambio rápido de escenario puede ayudar a recuperar su buen humor. Salga a la calle o a la terraza por un momento, tome aire, reciba la luz natural y si puede, acérquese a un prado, todo eso ayuda a la gente a mejorar su estado de ánimo. Si no tiene tiempo para una caminata al aire libre, vaya a una sala de reuniones vacía o a una oficina desocupada por algunos minutos. Si realmente puede con lo anterior, en 2015 unos científicos encontraron que una simple búsqueda de fotos de momentos alegres puede ayudar a disminuir los niveles de estrés.
#5. Escriba
Algunos estudios indican que escribir de lo que siente o sus emociones pueden afectar la manera como se siente. En uno de 2005, los voluntarios que escribieron sobre sus experiencias traumáticas tuvieron una mejor experiencia física y sicológica que aquellos que fueron neutrales. Por eso, tómese unos minutos para escribir en privado sobre eso que le está molestando. una vez termine, doble la hoja de papel y déjelo ir de su sistema.
#6. Haga algo amable
Según Webb, hacer algo amable para ayudar a alguien más es una de las cosas más fiables para mejorar el bienestar. “No tiene que ser algo realmente grande que haga la diferencia. Puede ser algo así como hacer un cumplido a alguien o cederle su asiento. Deténgase y dele las indicaciones a alguien que busca una dirección. Notará qué bien se sentirá después con usted mismo”, destaca.
#7. Autotrátese
“No hay algo mejor para el buen ánimo que satisfacernos a nosotros mismos”, dice la coach de meditación y mindfulness, Ora Nadrich, autora de “¿Quién lo dice? Como esta simple pregunta puede cambiar la manera en que piensa para siempre”. Un simple tratamiento puede lograrlo. Si no quiere usar el simple hábito de tratarse por medio de los alimentos, intente con la terapia craneosacral, que consiste en hacerse un suave masaje en su rostro y cráneo. “Puede ser muy cómodo y relajante y si lo practica por al menos 10 minutos, puede hacer la real diferencia en cómo la persona se siente”, dijo la terapista.
También puede intentar hacer algún chiste o broma por teléfono con un compañero del trabajo. Al minuto de empezar a reír o que usted logre hacer reír a alguien notará que empezará a mejorar su día.
Fuente: http://www.finanzaspersonales.co