Desde escotes y minifaldas hasta shows y comportamientos inapropiados provocados por el alcohol, las fiestas de fin de año de las empresas muchas veces son la fuente de historias que se conservarán durante años y que pueden destruir reputaciones.
Si quieres celebrar con tu equipo pero te preocupa que ocurra algo de este tipo, no te preocupes, aún puedes conservar el control. A continuación te compartimos cuatro consejos para evitar los comportamientos indeseables y divertirte:
1. Revisa tu tono
Si en tu empresa recientemente hubo un gran corte de personal o se eliminaron los bonos de fin de año, una gran y costosa fiesta no es la mejor opción. En lugar, intenta tratar tu fiesta de fin de año como lo haces con cualquier lanzamiento de campaña. Conserva el tono y el tema en alineación con las condiciones de la compañía. Si los momentos son difíciles, evita las comidas caras y haz algo más conservador en las instalaciones de la oficina o en un lugar más barato.
2. Establece el código de vestimenta
No quieres ser el Scrooge de la moda, pero si quieres evitar elecciones cuestionables de moda, asegúrate de establecer el tono. Por ejemplo, en la invitación podrías agregar la leyenda “vestimenta casual” para que las personas no exageren en su imagen o no sientan que tienen que gastar dinero para comprar nueva ropa para la fiesta. Por tu cuenta, puedes ir con el mismo suéter de siempre (o el “feo” de las fiestas), lo que hará que los demás se vistan en el mismo estilo.
3. Evita o limita el alcohol
Muchas malas decisiones se toman cuando se ingiere alcohol. Trata de limitar la barra libre, aunque no sea una decisión popular. También puedes ofrecer opciones de bebidas sin alcohol que son divertidas de tomar. Si dejas que los miembros de tu equipo se excedan con el alcohol, pronto tu contadora podría estar narrando historias sobre cómo no le agrada el novio de su hija y luego le dé un beso en la mejilla al CEO, mientras baila con cuernos de reno en la cabeza. Ese tipo de comportamiento puede ser divertido en una fiesta normal, pero no es adecuado en una de la empresa.
“Las personas deben saber cuándo están borrachas o cerca de estarlo. Por ejemplo, a mí me da sueño. Otros se ponen a abrazar a todo el mundo y expresar su amor. Evítalo”, dice Ben Huh, CEO de Cheezburger.
Cambia el lugar
En lugar de hacer la misma fiesta en el mismo restaurante o salón donde las personas comen, toman y bailan, intenta algo nuevo. Si tienes un equipo juvenil y activo, podrías optar por ir a patinar o hacer alguna actividad al aire libre. Sé creativo.
Cómo debes comportarte como líder
Lo primero que debes recordar es que la fiesta de fin de año es una fiesta, pero no una cualquiera. Es más bien como una conferencia divertida; pasas un buen rato, pero al final sigues trabajando. No importa si eres una startup o una gran corporación: Realmente esta celebración es un ejercicio para construir equipos.
Una de las cosas que distinguen a esta fiesta es que se celebra un final. La fiesta de fin de año se trata de un alivio colectivo: que el año ya terminó pero la empresa sigue existiendo, que las personas siguen teniendo trabajo, etcétera.
Antes de asistir a la fiesta debes hacerte una promesa: Que saldrás de ella con mayor respeto de tu equipo, dignidad y discreción que con las que entraste. La meta debe ser incrementar tu buena reputación y probablemente derribar algunos mitos sobre tu persona. La idea es divertirse, no crear chismes el lunes en la oficina.
También debes tener en mente que las personas te estarán observando, incluso más que en ámbito diario. Recuerda ser discreto, una virtud muchas veces olvidada en el ámbito laboral y que es especialmente importante en la fiesta de año. Principalmente porque estás vulnerable: Estás cansado, has trabajado todo el año y piensas que te lo mereces. Y es cierto. Por eso no conviertas esta ocasión en algo que no mereces como el ridículo y los chismes.
Por último, nunca hables de trabajo en la fiesta. No importan los resentimientos, los enojos, los pendientes ni los aciertos. Ésta es una ocasión para divertirse. Evita a toda costa hablar mal de otros y aprovecha la fiesta para ser generoso y agradecer a tu equipo.
Fuente: https://www.entrepreneur.com