Los dispositivos tecnológicos están tan adheridos a nuestra cotidianidad que solemos tratarlos como si fueran indestructibles, dejando que el móvil se pierda entre el sofá cuando vemos una película o tomando el portátil desde la pantalla para trasladarlo de una habitación a otra. La realidad es que los objetos tecnológicos son sumamente delicados aunque aparenten fortaleza física, porque se componen de decenas de pequeñas piezas que deben funcionar armónicamente. En esta oportunidad te ofrecemos algunas claves para alargar la vida útil de tu ordenador portátil, acciones sencillas que puedes repetir cada día para evitar una ruptura precoz en uno de los objetos que más utilizas.
1. Peso
Aunque resulte evidente que el portátil no es un mueble para apoyar objetoscomo cuadernos, libros o ropa, la mayoría de las personas han abandonado alguna pertenecía sobre el ordenador cuando está cerrado. Su estructura rígida y plana semejante a una tabla, nos impulsan a tomar estas decisiones fugaces cuando, por ejemplo, estamos estudiando y dejamos los materiales sobre el ordenador para continuar con la jornada más tarde. Una, dos, hasta tres veces no producirá grandes cambios en tu portátil, pero si se torna una costumbre podrías ocasionarle daños severos. El ordenador no debe tener objetos encima, es un aparato tecnológico que no está diseñado para soportar peso.
2. Ventilación
El sobrecalentamiento del ordenador es su peor enemigo porque estropea las piezas al punto de convertirlas en inutilizables. Asegúrate de que las ranuras de los ventiladores respiren sobre una superficie lisa como mesas o escritorios, cuya estructura permite que una cámara de aire pase por debajo de la base del aparato. Colocarlo sobre el sofá, la cama o incluso tu falda, son pésimas opciones si pretendes cuidar el dispositivo porque no puede airearse. Evita su exposición directa al sol eligiendo cuidadosamente el lugar donde la sitúas si hay ventanas, además de conseguir una base refrigerante que se vende como accesorio para los días más calurosos, generalmente conectada por USB.
3. Polvo
Es una de las causas más comunes en el mal funcionamiento de un portátil que se soluciona fácilmente cerrándolo cuando no lo usas. Puedes extremar el cuidado guardándolo en su funda para espaciar los momentos de limpieza, que realizarás con un producto no abrasivo y que no sea en spray directo sobre el aparato. Emplea un cepillo de dientes o bastoncillos para los oídos de modo que llegues a las ranuras más escondidas, luego de haber pasado un paño sin pelusa. Los líquidos jamás deben llegar al interior del aparato si quieres extender la vida útil de tu portátil.
4. Batería
Cárgala recién cuando se haya agotado y úsala hasta que vuelva a vaciarse, sumado a la reducción de su consumo para ocasiones especiales. Puedes utilizarla un tiempo cada día, pero abusar de ella logrará daños a largo plazo. Otra acción simple que alargará su vida útil es separar la batería físicamente del portátil (cuando el ordenador lo permita) para limpiar el conector de la batería al ordenador con algún producto apropiado. Si repites la conducta tres o cuatro veces al año te asegurarás de optimizar la transmisión de energía entre el portátil y la batería.
Fuente: http://noticias.universia.es