La escena puede tener lugar un día cualquiera. Mientras va en camino a su trabajo, un joven se entera que su banda de rock favorita dará un concierto monumental. No lo duda un segundo: pedirá a su jefe salir de la oficina más temprano que de costumbre el día del concierto. ¿Qué puede pasar? ¿A quién le afecta?
Lo único que deberá hacer es, al llegar al trabajo, pedir hablar con el jefe y, cuando éste lo reciba, dedicar unos minutos a exponer las razones de su petición. Antes de responder, el jefe seguramente pensará en qué tan colaborativo ha sido el solicitante cuando se le ha requerido; echará un vistazo al calendario y querrá saber si algún otro empleado podrá cubrir la ausencia. Hecho lo anterior, tomará la decisión de dar el permiso o negarlo.
En efecto, no parece gran cosa. Pero, en una empresa de 100,000 empleados, los gerentes tienen que tomar este tipo de decisiones prácticamente todos los días, lo que trae sus consecuencias. Si las solicitudes de los empleados son aprobadas, éstos saldrán en paz de la oficina del jefe; pero si no, lo más seguro es que se sientan desilusionados o que incluso piensen que el permiso les fue negado por cuestiones personales.
Kronos, la empresa que inventó el reloj checador automatizado que hace décadas se popularizó en oficinas y fábricas, cree poder hacer que estas gestiones del día a día se desahoguen con mejores resultados. Para este fin, creó Workforce Dimensions, una plataforma que opera como una red social, para ayudar a la productividad y a fortalecer el compromiso de los empleados.
Éstos la instalan en su celular, tienen un perfil que pueden personalizar con su fotografía y, desde ahí, gestionan la agenda de trabajo, las peticiones de tiempo fuera, el pago de tiempo extra, reuniones y tareas pendientes. También ven las estadísticas de su desempeño, con base en las cuales los jefes pueden tomar decisiones.
Para su desarrollo, se utilizaron aplicaciones de Inteligencia Artificial, arquitectura de información y un modelo responsivo con indicadores de medición flexibles, todo alojado en la nube pública de Google.
La interfaz busca empatar con el perfil de los trabajadores, dice Gabriel Alvarado, director general de Kronos Latinoamérica.
“Cuando trabajas con gente muy joven, es importante darles la información que necesitan sobre su desempeño. Ellos saben usar esa información para hacer las cosas mejor. Es importante que puedan saber los porqués detrás de las decisiones de los jefes. Eso genera un alto grado de confianza”, dice Chris Mullen, experto en temas laborales de la Universidad de Colorado.
“Estamos dirigiendo esta solución a los millennials”, señala Alvarado, quien asegura que la solución, fácil de usar, es adoptada más pronto por los empleados que por sus jefes. “Tenemos gente muy joven en sectores de la industria, tiendas departamentales, tiendas de conveniencia, boutiques de moda; la gente joven trabaja en todos estos negocios, y está más tecnificada que los propios directores de las empresas”. Un tercio de las personas disponibles en el mercado laboral son recién graduados, explica Bill Bartow, vicepresidente global de Productos de Kronos.
Mirada de halcón
La nueva plataforma de Kronos se gestó en el Proyecto Falcón, una analogía que relaciona al halcón, que es más rápido que sus depredadores y vuela por encima de las nubes (en alusión al cloud computing).
Kronos logró llegar a esto porque cuenta con una estrategia de adopción de tecnología que ha generado ya la adquisición de 71 startups en los últimos cinco años. Esta suerte de engranes tecnológicos se traduce en ahorros al automatizar los procesos gerenciales.
Pero, ¿por qué las empresas anhelan empleados comprometidos? Porque trabajan 3.5 días más al año que el resto y ayudan a que los procesos sean más eficientes, además de que las compañías en donde hay un alto nivel de compromiso tienen una rentabilidad 21% superior a la media, según el estudio “Worldforce Mindset”, hecho por AON.
Mayor productividad, sumada a procesos de producción con menos errores, genera ahorros y más ganancias. En compañías con más de 1,000 empleados, se calcula que el trabajo manual cuesta 71.7 millones de dólares (mdd) por hora, por lo que elevar la productividad en 1% da como resultado un ahorro “automático” de 750,000 dólares. “La manera en que trabajan empresas como Uber o Airbnb tiene gran relevancia en cómo las empresas se relacionan con cada empleado”, indica Bill Bartow, de Kronos.
Kronos tiene altas expectativas de su invento, en el que trabajaron 600 personas durante cuatro años y se invirtieron 150 mdd. “La orden fue: debemos pensar en qué producto dejaría fuera del mercado a nuestro negocio… y crearlo antes de que lo haga la competencia”, dice Aron Ain, CEO de Kronos, en una entrevista realizada en Las Vegas.
Fuente: https://www.forbes.com.mx/